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jueves, 21 de julio de 2011
...UNA CEREMONIA DE AGUACOYA EN LOS ANDES ECUATORIANOS
Lo sagrado es inherente al ser humano y se expresa de distintas formas, en distintos espacios y en distintos tiempos. Uno de estos espacios son las ceremonias sobre las cuales trata este escrito. Una ceremonia es una actividad, con un significado ritual, desarrollada en una ocasión especial. Una ceremonia es ciertamente un espacio de conexión con lo sagrado, de dejar a un lado la vida cotidiana, y entrar en un espacio ante el cual es preciso mantener una actitud especial.
Las ceremonias a las que nos referiremos son ceremonias rituales nocturnas que se realizan bajo la guía de un curandero o Chamán y en donde se utiliza plantas sagradas que permiten alcanzar otros niveles de conciencia a los participantes. Este tipo de ceremonias están ampliamente difundidas en el mundo. En este caso analizaremos una originaria de América del Sur, mas específicamente de Ecuador, Perú y Bolivia, en donde se utiliza como planta sagrada el cactus comúnmente denominado San Pedro, y cuyo uso ancestral y medicinal se remonta hace miles de años.
Debido al carácter arcano de este tipo de ceremonias, no existe mucha información al respecto, por lo tanto, tomaré como referencia experiencias personales complementadas información bibliográfica de ceremonias similares. En estas ceremonias los elementos que intervienen están llenos de sincretismos que recogen tradiciones y elementos de distintas partes y culturas.
LA CEREMONIA DE AGUACOYA
Descripción de la ceremonia: La parte medular de la ceremonia, es donde se consume la planta sagrada (llamada medicina), y donde la gente empieza su viaje interno. La gente entra al círculo sagrado por el portal del este, y todos se van ubicando alrededor del fuego y del altar. Cuando todos han entrado, el chaman comienza a dirigir la ceremonia y a dar las instrucciones. Luego se reparte la medicina a la gente en el sentido de las agujas del reloj, comenzando por los que están a la izquierda del Shaman. El último en beber la planta sagrada es el Chaman. Comienzan a sonar los tambores que ayudan el traspaso hacia esta nueva realidad. El Chaman va curando y acompañando a la gente en el viaje. A menudo la curación incluye lo que se conoce como una limpia, realizada por el Chamán a quien lo necesite o lo solicite.
El Chamán: El Chamanismo (o Shamanismo) no es una religión, sino un complejo de de creencias, mitos, rituales, prácticas y parafernalia cosmológicas centradas en el Chaman. Es considerado un fenómeno ancestral y universal, presente en diversas culturas alrededor del mundo. Aunque el termino Shamán es utilizado actualmente dentro de distintos contextos, la figura del chaman se refiere a una especialista religioso que tiene la habilidad de entrar en trance y comunicarse con los espíritus para propósitos de curación, fertilidad, protección y agresión. También sirve como un guía y ocupa una posición especial dentro de la sociedad.
Para que el Chamán pueda ejercer su vocación y su papel en la sociedad, debe primero escuchar el “llamado”, que es lo que hace que decida seguir el camino del chamanismo. El llamado puede consistir en alguna circunstancia extraña (un sueño, una enfermedad, un rayo), a partir de la cual inicia su aprendizaje, que puede durar varios años, y que se caracteriza normalmente por ser dificultosa. El chamán se convierte así en un practicante religioso que media entre su sociedad y la fuerza supernatural para generar efectos de protección y bienestar a sus congéneres. Existen algunas diferencias entre el chamanismo ancestral y el chamanismo contemporáneo. Una de ellas es que el Chaman contemporáneo ha dejado de ser un líder social y comunitario de una gran sociedad, como probablemente antes lo era, y su papel se ha vuelto mucho más secular.
• Aguacoya y su uso ceremonial: En la ceremonia, la planta sagrada, también llamada medicina, juega un papel trascendental. Durante miles de años y en diversas culturas, las plantas psicoactivas han servido para contactar a los dioses, diagnosticar o curar enfermedades, evaluar o resolver problemas, incorporar fuerza física o simplemente para relajarse y divertirse. La mayor variación registrada de plantas psicoactivas se concentra en México y el noroeste de Sud América.
El cactus de los cuatro vientos San Pedro (Trichocerus pachanoi) tiene diversos nombres, dependiendo de su localidad. En la costa norte del Perú se lo conoce como “Huachuma”, en la zona norte de los andes de Perú y de Bolivia, como “Achuma”, y en Ecuador se lo conoce como “Aguacoya” o “Gigantón”. El nombre de San Pedro fue adoptado por la influencia cristiana en el Perú en la época colonial, probablemente porque San Pedro custodia las llaves del cielo.
Existen varios tipos y calidades de esta planta. Los curanderos consideran que las mejores plantas son aquellas que crecen a mayor altitud; aquellos que se dan en zonas donde viven el jaguar o la boa (herencia mítica en la que se asocia el san Pedro con estos animales) y también son mejores los cactus que tienen cuatro, siete, ocho o nueve puntas (con mayor contenido en mezcalina y mayor poder alucinógeno). Cuanto más tiempo haya estado almacenado un cactus, más potente y mayor contenido en alcaloides y derivados de la mezcalina tendrá; en ocasiones, el curandero guarda las plantas cortadas hasta un año para provocar esa maduración.
El principal compuesto activo de la planta es la mezcalina, un alcaloide que actúa estimulando las áreas corticales visuales y de asociación, y alterando la conciencia. En dosis iguales o superiores a 5 mg/kg, provoca alucinaciones en el ser humano. El efecto aparece una o dos horas tras la ingestión, y la experiencia visual dura entre dos a seis horas, dependiendo de la cantidad ingerida, y disminuye gradualmente. En esta fase sensorial hay pérdida de la percepción temporal, alucinaciones visuales vivas y, en menor medida, alteraciones auditivas, olfatorias o gustativas. Es común que proveque náusea y/o vómito.
La evidencia más antigua del uso ritual del cactus San pedro data de hace 1300 años aC, en la cultura Chavín en el Perú. Su uso se extendió a varias regiones y culturas en Perú, Ecuador y Bolivia, y disminuyó con la llegada de los españoles. Actualmente, estos ritos curativos tradicionales se los sigue realizando principalmente en las tierras altas del norte de Perú, en el sur de Ecuador y en la costa peruana. En el estudio del consumo de este tipo de drogas en rituales de curanderismo es fundamental que se tenga en cuenta también el contexto social y las expectativas del individuo.
Actualmente también son los mestizos de Perú y Ecuador que consumen el cactus San Pedro, pero los rituales suelen combinan componentes originales e indígenas con creencias, prácticas y símbolos derivados del catolicismo. Una parte de la población acude a las mesas o actos rituales, donde el maestro curandero trata con el san Pedro múltiples patologías psicosomáticas, mal de suerte y otras entidades. El San Pedro también es utilizado para hacer brujería amorosa, para combatir hechicerías y para asegurar éxito en empresas personales. “San Pedro posee un simbolismo especial en el curanderismo, ya que el San Pedro está siempre en armonía con los poderes de los animales, de los seres o personajes fuertes, de los seres verdaderos, de los seres sobrenaturales”.
Elementos y Análisis
• Espacio y tiempo ceremonial: La ceremonia es un evento importante, es un espacio de curación en donde los participantes se encuentran en un espacio diferente al cotidiano. El lugar en donde se realiza la ceremonia está apartado de la ciudad. El lugar es un componente importante en el ritual ya que permite conectarse con lo sagrado, con la naturaleza y sus espíritus. Así como el espacio es importante, el tiempo también lo es. En la ceremonia se toma en cuenta la fase lunar, y también es importante que sea en la noche ya que la oscuridad crea un ambiente adecuado en donde el chaman guía la experiencia. Además, la acción sicotrópica del San Pedro produce una sensibilización de los sentidos en general y en particular de la vista (que se manifiesta en midriasis o dilatación de las pupilas), haciendo la experiencia visual demasiado fuerte con el resplandor solar .
La ceremonia se realiza con la gente alrededor del altar, donde se encuentra el fuego. El círculo también tiene 4 portales que se dirigen hacia los 4 puntos cardinales y que son cuidados por guardianes. Dentro del círculo sagrado hay algunas reglas como que cada participante tiene su puesto y debe permanecer ahí, además, es importante caminar siempre en dirección de las agujas del reloj dentro del círculo, y si alguien necesita salir o entrar del círculo sagrado, debe hacerlo por un portal específico. El círculo sagrado de la ceremonia está lleno de simbolismos; a continuación se hablará de algunos.
• Los cuatro caminos: Los cuatro vientos o cuatro caminos del mundo, son importantes símbolos en varias culturas. Y es un concepto muy importante en la cosmología andina. Comenzando con la medicina, los cactus de cuatro costillas son los más potentes y especiales, ya que representan a esta estructura cuaternaria. En la ceremonia, en cada portal hay banderas de diferentes colores. El portal del norte es blanco y representa el portal del frío. Si vienen chamanes invitados, se sientan ahí. El portal del sur lleva el color amarillo, y representa la muerte. Es hacia allá donde todos nos dirigimos. El portal del oeste es negro, y es donde se sienta el chamán principal. El portal del este es rojo, por donde sale el sol. Cada portal tiene sus guardianes.
• Cantos sagrados tambores, instrumento: Los sonidos repetitivos del tambor, de la maraca, y de los cantos sagrados ayudan a entrar a los que participan en la ceremonia en un estado de trance, y también permite que la medicina haga efecto.
• La mesa o altar: La mesa o ‘altar’ se refiere al espacio en donde se colocan los objetos de poder, que son necesarios para la práctica. En la religiosidad andina se observa un dualismo entre el bien y el mal; así, la mesa de curación se divide en dos partes: la mesa curandera o hierbatera (la parte situada a la derecha) y la mesa ganadera (la mitad de la izquierda). La mesa curandera sirve para curar al paciente y contiene imágenes o estampas de santos católicos, hierbas, cristales y perfumes. La parte ganadera de la mesa contiene piedras y huacos. “Los objetos de poder en la mesa no son meramente una colección azarosa de cosas”, son cosas que el chamán han ido acumulando gradualmente durante los años de su práctica”. El altar de esta ceremonia contiene varios elementos de poder, en efecto, algunos son cristianos, otros son contemporáneos (como muñequitos que representan animales), y también hay hierbas como el tabaco y piedritas.
• La Limpia: La parte de la limpia es en donde más se evidencia el curanderismo. No lo hacen todos sino solo los que quieren, probablemente con la finalidad de curarse, de renovarse. La limpia se asemeja a otras formas de curanderismo que realizan los curanderos en otras partes y en otros contextos culturales en el Ecuador. El motivo de la limpia es eliminar un ‘daño’ o hechizo, que se puede manifestar en forma de síntomas orgánicos (de carácter psicosomático), mala suerte, problemas amorosos, familiares, laborales, etc. El paciente que llega al maestro curandero es convencido por éste de que su enfermedad puede diagnosticarse y tratarse de acuerdo con la simbología presente en la mesa. En la limpia de esta ceremonia, el curandero entrega una piedra al paciente, quien se la puede pasar por el cuerpo. Luego el chamán le sopla alcohol. Esto puede ir acompañado de música.
• Contexto y Actualidad: En la actualidad, las ceremonias rituales curativos llevados a cabo por los maestros curanderos contemporáneos son probablemente muy diferentes de las que hubo en el pasado porque han ido incorporando nuevos elementos y el contexto socio cultural es distinto. Quienes asisten a la ceremonia no es la mayoría de la población ecuatoriana, de hecho, poca gente sabe de la existencia de la ceremonia de Aguacolla, y la información no está difundida. Así mismo, que la gente la gente que va puede o no puede pertenecer a distintas religiones, creencias o filosofías. El chamán también es mestizo, es un curandero contemporáneo con mucho conocimiento y sabiduría.
Conclusión
Tras la conquista española, las ceremonias de Aguacoya, así como otras formas de curanderismo han sido perseguidas por la iglesia católica, y catalogados como algo incorrecto y hasta diabólico. A pesar de esta persecución, “estas prácticas han persistido hasta el presente por una tradición oral que pasa de curandero a aprendiz a través de los siglos”. La tradición milenaria del uso terapéutico y alucinógeno del cactus de san Pedro parece haber mantenido una continuidad cultural con el curanderismo andino contemporáneo esta ceremonia de san pedro contemporánea es una fusión de varios elementos.
Además que se mantienen los elementos ancestrales, estas ceremonias, que, al igual que otras prácticas han sido adoptadas por grupos occidentales como método para la expansión de la conciencia. Han adoptado principios básicos y elementos de otras ceremonias alrededor del mundo. Debido a la influencia católica, objetos como estampillas de santos y crucifijos están en el altar. Las banderillas de los portales también están presentes en culturas nativas de Norteamérica, como los Sioux y los Navajos. El Te-mazcal viene de los Mayas, mientras que la limpia viene de formas de curanderismo practicadas en América del sur. Incluso se pueden distinguir elementos que tienen parecido con religiones antiguas de la naturaleza de Europa, como el círculo sagrado.
Concluyo que las ceremonias de Aguacoya analizada en este estudio, son en su mayoría un sincretismo que recogen tradiciones y de distintas culturas y contienen elementos de conocimientos ancestrales compartidos.
Bibliografía:
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- Vargas, Lolita. http://www.yollocalli.com.mx/temazcal.htm
- http://www.chamanismo.info/viewtopic.php?f=4&t=3
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